Pedalibre denuncia un nuevo ataque del Ayuntamiento de Madrid a la bicicleta y solicita la adaptación de los túneles y posibilidades reales de aparcamiento
El alcalde de Madrid anunció en el debate del estado de la ciudad la prohibición del tránsito de las bicicletas por los túneles de la ciudad Madrid y restricciones en el aparcamiento.
Lejos de asumir la promoción ciclista dentro de sus objetivos, el Ayuntamiento de Madrid vuelve a arremeter contra la bicicleta ignorando criterios básicos en la promoción ciclista, como son los trazados directos y la necesidad de lugares seguros para estacionar la bicicleta.
- Prohibición de la circulación por túneles:
El túnel, en muchas ocasiones, proporciona unas ventajas ineludibles en cuanto a superación de barreras, rodeos y pendientes innecesarias, tal y como indica el prestigioso Manual de Infraestructura Ciclista Holandés CROWN y otros tantos. Además, el propio Reglamento General de Circulación establece tal posibilidad. Por sus características, un túnel debe guardar una serie de recomendaciones en cuanto a intensidad lumínica, drenaje, buen mantenimiento, limpieza, colores luminosos en las paredes, etc., pero es tal vez la adaptación de éste a la bicicleta, un aspecto clave que debería tenerse en cuenta. En este sentido, un túnel diseñado para tráfico motorizado suele coincidir con una vía rápida, lo que hace más necesario segregar el tránsito ciclista y aplicar resguardos de seguridad suficientes, entre el tráfico y la pared o acera. - Restricciones en el estacionamiento de bicicletas:
La escasez de lugares diseñados para el aparcamiento de bicicletas es una característica de nuestra ciudad que incide en el bajo uso de este medio de transporte. Por ello, para compensar esta falta, en su momento alegamos en la ordenanza de movilidad en vigor, la posibilidad de amarre en el mobiliario urbano siempre que no suponga deterioro, aspecto éste que fue recogido. Eliminar esta posibilidad es una grave ofensiva que va contra una de las ventajas exclusivas de la bicicleta: el puerta a puerta. Por otro lado, resulta insultante equiparar la bici a vehículos de mucho mayor volumen y peligrosidad como las motos y coche y centrarnos en ella cuando su uso en Madrid no llega al 1%. En Madrid hay un problema de vehículos estacionados en aceras, tanto legal como ilegalmente, que dificultan el tránsito peatonal y el uso estancial, pero se debe a los coches y motos, no a las bicis.
Por todo ello, solicitamos al Ayuntamiento de Madrid:
- La mejora de los túneles en nuestra ciudad desde el punto de vista ciclista que contemple carriles bici segregados, exclusivos y debidamente conectados a la red ciclista, iluminación propia y uniforme con el exterior, eliminar el aspecto lúgubre de muchos de ellos, un buen mantenimiento e incluso un cambio a un uso exclusivo ciclista (discriminación positiva).
- Mantener la posibilidad de amarre en el mobiliario urbano mientras siga existiendo escasez de lugares exclusivos que proporcionen seguridad, cercanía y plena operatividad.