PROPUESTAS PARA MEJORAR LOS DESPLAZAMIENTOS EN BICI COMO MEDIO DE AUTOCUIDADO Y PROTECCIÓN A LA SOCIEDAD

#EnBiciContraCovid19

Diez días después de la declaración del estado de alarma, toca hacer balance y evaluar si las medidas aplicadas en cuanto a la movilidad son las más adecuadas y si se pueden mejorar.

Al margen del confinamiento al que estamos sujetos, sabemos que el grado de protección ante el coronavirus tiene mucho que ver con preservar las distancias de seguridad fuera de nuestro domicilio. Es importante, no solo el entorno laboral o lugares donde hacemos la compra básica, sino el medio y las condiciones de cómo nos desplazamos.

Sorprendidos por la sospecha que, desde diferentes instancias policiales, administrativas y de medios de comunicación, recae sobre quien usa la bicicleta, publicamos una entrada en la que recordamos el contenido del Real Decreto por el que se dicta el estado de alarma. De él se desprende que la bicicleta, como vehículo que es, es totalmente legal y hasta recomendado en los supuestos autorizados.

Días más tarde, la Abogacía General del Estado publicó el documento de respuestas a cuestiones planteadas sobre la interpretación del RD 463/2020, modificado por el RD y 465/2020, el cual puedes ver a continuación y que en su momento difundimos en redes sociales.

Este documento dice literalmente en el punto 7:

[…]Como puede observarse, la voluntad del legislador es que aquéllas actividades para las que se permite la circulación de personas durante la vigencia del estado de alarma se realicen en todo caso “individualmente”, ya se haga la circulación andando, corriendo, en bicicleta, en motocicleta o en cualquier otro vehículo.

Por su parte, la Coordinadora Estatal de Defensa de la Bicicleta, ConBici, a la que
pertenecemos, en respuesta al desconocimiento generalizado, ha recordado públicamente las ventajas del uso de la bicicleta en el contexto que nos encontramos y reclamado medidas a favor de facilitar su uso.

Centrados en nuestra ciudad y supuestamente, en aplicación del Real Decreto, el Ayuntamiento de Madrid, cerró el 14 de marzo los parques y jardines de Madrid para evitar aglomeraciones.

Fue una medida válida para tomar conciencia del grave problema que tenemos, pero descuidó que por muchos de estos parques que cerraron transcurren itinerarios ciclistas. Casi 10 días después, la población de Madrid está plenamente concienciada. Lo vemos a diario por las imágenes que se difunden de una ciudad vacía y sin movimiento. La crisis del coronavirus pasa necesariamente por evitar las situaciones de transmisión y así lo estamos demostrando todos los días.

Incomprensiblemente, también cerró el servicio público de BiciMad lo que supuso una clara discriminación hacia este medio de transporte al negarle las mismas medidas preventivas contra el contagio que la flota de autobuses, metro, taxis, etc. Este cierre, sobrecarga mayormente el transporte público haciendo que este, por su carácter colectivo, sea menos seguro y eficaz en cuanto a la transmisión del virus.

La experiencia de Wuhan o Nueva York en promover el uso de la bici y mantener el servicio público de bicicletas, debiera tenerse en cuenta.

Por otro lado, se libera el Servicio de Estacionamiento Regulado lo que supone una clara apuesta por el uso del coche sin considerar que es indudable que la propagación del virus es más fácil en un lugar cerrado como el habitáculo de un vehículo que en uno abierto, tal y como dice el documento de la Abogacía del Estado antes referido.

La creciente necesidad de establecimientos sanitarios y su dotación de medios materiales y humanos hace que varíen las necesidades de desplazamiento, toda vez que mucho de este personal viene de fuera de Madrid o se aloja solo, lo que les hace no disponer de los mismos recursos de su residencia habitual con su familia.

El uso de la bicicleta en estos casos ofrece un desplazamiento rápido, cómodo y sobre todo seguro hacia sus lugares de trabajo. Facilitarlo debiera ser una medida clara para protegerles y proteger a toda la población. La menor siniestralidad de la bicicleta es un valor añadido de cara a demandar menos recursos sanitarios.

Hace escasamente una semana, el artículo publicado en la revista Ciclosfera Coronavirus y bicicleta: la mejor forma de moverse, pedaleando, recordó los diferentes estudios existentes que demuestran que la bicicleta está exenta de riesgos frente al contagio, ralentiza los efectos del envejecimiento y beneficia claramente el sistema inmunitario, lo que hace que diferentes ciudades recomienden y faciliten su uso.

Es tal el potencial que tiene la bicicleta que incluso desde la Federación Europea de Ciclistas (ECF) proponen la apertura de talleres específicos para asegurar el buen funcionamiento, tal y como ya funcionan en Alemania, Francia o Nueva York.

PROPUESTAS

Desde la Asociación Pedalibre estamos comprometidos a colaborar en la medida de nuestras posibilidades para hacer de esta situación excepcional algo transitorio, difundiendo todas aquellas recomendaciones útiles e información venida de fuentes oficiales. Pero también, queremos acercar a una sociedad, el potencial de la bicicleta que, si ya es muy importante en situaciones normales, lo es más en un escenario de crisis como el actual.

1. Que la bicicleta sea considerada como opción de movilidad prioritaria en nuestra ciudad al tratarse de un vehículo con bajo riesgo de contagio y una alternativa eficaz y muy eficiente de transporte, tanto en la situación actual como en el futuro una vez superada esta excepcionalidad. Quien se desplaza en bicicleta se protege a sí mismo y protege a la sociedad de la transmisión del virus. La Red de Ciudades por la Bicicleta, a la que pertenece la ciudad de Madrid, lo deja claro en su comunicado.

2. Creación de corredores ciclistas. La eficiencia de la bicicleta pasa necesariamente por crear trayectos exentos de rodeos y con el menor desnivel posible. En este sentido, son las grandes avenidas las más eficientes pero que, aun estando hoy por hoy vacías, son un elemento de riesgo por las mayores velocidades de los motorizados y la velocidad comercial del transporte público. Habilitar los carriles bus para uso ciclista exclusivo, aprovechando la bajísima ocupación actual y/o crear carriles bici temporales a partir de elementos sencillos y fácilmente retornables como pintura, jardineras, conos, etc. puede ayudar a que los traslados en bicicleta se hagan con la seguridad necesaria.

3. Apertura parcial de los parques, en especial, aquellos itinerarios ciclables o por los que pasa un carril bici. Por ejemplo, el Paseo de Coches de El Retiro, la senda bici de Madrid Río o el propio Anillo Verde. Las necesidades de tránsito de la bicicleta son diferentes a un transporte motorizado. Favorecer la bici pasa necesariamente por crear trayectos directos, de bajo estrés y seguros. Los parques juegan un papel prioritario en elevar la calidad de los trayectos en bici y hemos de conservarlos.

4. Control de la velocidad de los motorizados: de todos es sabido que el incremento de la velocidad está relacionado directamente con la baja intensidad de la vía. Actualmente, esta intensidad es muy baja lo que provoca velocidades inadecuadas y peligrosas de los vehículos motorizados, lo cual determina la gravedad del accidente y lesividad de las víctimas. Las altas velocidades son por tanto un factor de peligro y disuasión para la movilidad activa como la bicicleta.

5. Apertura del sistema de bicicletas públicas BiciMad. Desinfectar las bicicletas, del mismo modo que se hace con el metro y autobús, más la recomendación del uso de guantes y/o desinfección particular, es suficiente y compensa claramente su puesta en marcha. Ofrecer este sistema al personal sanitario y otros que desarrollan trabajos de primera necesidad para sus desplazamientos diarios, es facilitarles la tarea y aumentar el grado de protección ante la transmisión del coronavirus. La apertura podría ser parcial, de unas determinadas estaciones. Por ejemplo, las más próximas a los centros sanitarios, a los hoteles reconvertidos, etc.

7. Habilitar espacios de estacionamiento en los establecimientos hospitalarios, hoteles y resto de lugares que atraen desplazamientos, de lugares seguros para aparcar la bicicleta

8. Apertura de establecimientos de guardia de reparación de bicicletas a fin de asegurar las buenas condiciones de uso de la bicicleta para la realización de las actividades que se enumeran en el artículo 7 del RD 463/2020 y el Art. 10.

Desde Pedalibre no queremos dejar pasar la ocasión de reconocer el trabajo de los responsables políticos, agradecer el tremendo trabajo de todo el personal que desarrolla trabajos esenciales como la distribución y venta de alimentos, limpieza, emergencias, agricultura, ganadería, transportes, comunicación, etc. y especialmente, el sobresfuerzo y dedicación del personal sanitario. Un fuerte aplauso para todos ellos.

Entre todos y todas saldremos adelante. Ánimo y fuerza